La elaboración del zumo de naranja empieza en la finca donde se cultiva la fruta. Allí se cultivan las naranjas hasta que están maduras y listas para su recolección.
Estas etapas normalmente empleadas son:
Seguimiento previo a la recollección.
Antes de llegar a la planta de elaboración, seguimiento de la fruta en el campo para recolectarla en el punto óptimo de madurez.
Recepciópn de la fruta en la planta
Una vez se recolecta la fruta, se lleva directamente a la planta de procesado, donde solo las naranjas sanas en buen estado y con la madurez adecuada serán seleccionadas para el zumo de naranja.
Antes de pasar a ser procesada se analiza que cumple con los estándares de calidad que hayan establecido y posteriormente se da el ok para su procesado.
Esta selección tiene por objeto garantizar que la fruta no pierda ninguno de sus nutrientes naturales y siga siendo una fuente rica de vitaminas.
Lavado de la fruta
Después, la fruta se lava adecuadamente antes de exprimirla. Constituye la primera etapa de la línea de procesado. La naranja es sometida a un lavado enérgico con agua, asi garantizamos la higiene.
Selección fruta en la cinta
La naranja pasa por una cinta donde se selecciona de nuevo y las que no son aptas son eliminadas. Así nos aseguramos que solamente la fruta idónea se convertirá en zumo.
Extracción del zumo
Para la extracción del zummo se usan extractoras industriales “in line”. Estos equipos realizan un exprimido de alto rendimiento y bajo contenido en aceites esenciales.
Posteriormente se tamiza el producto para eliminar parte de la pulpa y restos de corteza, que puedan quedar.
Pasterización del zumo
Tras exprimir el zumo de la naranja, se pasteuriza ligeramente. Así nos aseguramos que el producto no se va alterar.
Es proceso muy extendido y aceptado que ayuda a conservar el zumo durante más tiempo y protege los nutrientes naturales para asegurar una calidad óptima.
Envasado del zumo
Finalmente el zumo es embotellado en su envase final para ser distribuido y que llegue al consumidor.
Estos zumos de naranja natural son una buena fuente de nutrientes y constituyen una buena opción para el consumidor, ya que conservan todos los nutrientes y vitaminas de la fruta de la que proceden en proporciones semejantes.